“A PESETA LA PAREJAâ€
(La guardia civil de Huesca)
El cuartel de la Guardia Civil tuvo varias ubicaciones en Huesca, ya en el 1917 estaban en la Calle Alcoraz, para después recalar en la Avenida MartÃnez de Velasco, junto a un ultramarinos que ofrecÃa las famosas sardinas de cubo (Guardia civiles se quedó como apodo dicho pescado del mar), y que las publicitaba con un cartel que rezaba: “A 50 CTS EL CIVILâ€, por consiguiente el alto mando de dicha institución llamó la atención al comerciante para decirle que cambiara el letrero por otro, presto y solicito lo cambió por “ A PESETA LA PAREJAâ€, dejando patente la socarronerÃa aragonesa, según Don Pedro Gonzalez y Manuel Benito, escritores locales.
Aparte de la introducción de este escrito a modo de sonrisa, lo cierto es que la Guardia Civil de Huesca tuvo una verdadera trashumancia por las calles oscenses durante muchos años, “según el momento y las necesidades de dicho Cuerpoâ€, recalaron en la Plaza Latre, Coso Alto y Lizana, en el 1875 van a la Calle Quinto Sartorio, mas adelante a las Carmelitas Descalzas , ubicada en la actual plaza de la Concepción Arenal, (poco tiempo estuvieron en esta plaza), ya que la Prisión Provincial acabó en dichas instalaciones, aunque pienso que no debió ser el lugar ideal, pues como vecinos tenÃan al Hotel Pirineos, hoy en dÃa desaparecido.
No cabe duda que la Guardia Civil a través de su periplo por las calles de la Ciudad, ha ido dejando sus huellas y su historia entre los oscenses. Los mas viejos recuerdan a la pareja de Guardia civiles montados a caballo, saliendo por la mañana hacia las tierras bajas (Monegros) para dificultar las labores de los bandidos, entre capas y percherones untados con grasa, negra como el hollÃn, como aislante de la lluvia, sin entrar en mas consideraciones, pero no quita que dicho Cuerpo es parte de nuestra Historia, para unos y otros, pese a quien le pese.
Huesca y sus Historias