Tour de Francia 2008

Otro año más, llega el calor, el verano, las “terracitas”… y para los amantes del pedaleo la “Grand Boude”. Lamentablemente no podremos contar con Contador “valga la redundancia”, el actual campeon de la carrera Gala, ya que su equipo (Astana) fué expulsado del Tour al dar positivo por una transfusión de sangre el año pasado su lider Kazajo Alexander Vinokurov.
Este año podemos disfrutar de un recorrido diferente (por fín). Para empezar no hay prólogo, sino etapa en línea.

Luego tenemos una contrarreloj individual de 30 kms en la cuarta etapa, no muy larga, pero ya se empezaran a notar las primeras diferencias entre corredores. Hasta la sexta etapa no tendremos llegada en alto con etapa de media montaña con un final no muy duro. Tres días depues empieza “la marcha”, con la montaña de verdad.
Habrá una primera etapa con 2 puertos clásicos de 1º categoria (Peyresourde y Aspin). La senguda etapa será seguramente uno de esos días donde se ven ya los posibles ganadores. Habrá 2 puertos durísimos (Tourmalet y Hautacam) acabando en este último.

Despues de semejante gesta, tendremos jornada de descansos y luego 3 etapas sin demasiada trascendencia hasta llegar a Italia.

Llegados a los Alpes, pasarán por Pratonevoso, un puerto sin demasiado protagonismo, y tras él habrá otra jornada de descanso para llegar con fuerza al tramo fuerte de los Alpes. Tras el decanso tenemos una etapa muy interesante, con 2 puertos de consideración: Lombarda (2300 metros de altitud y 21km al 7%) y Bonette (2710 metros y 26 km al 6.5%), depues tenemos un descenso de 20 km muy empinado hasta llegar a la meta. Esta etapa será la antesala del gran clásico del Tour:

Embrun-Alped´Huez, con las ascensiones a Galibier (por su lado suave), Croix de Fer y Alpe d´Huez (con sus famosas 21 curvas de herradura).
Tras la etapa en la que seguramente ya se habrá decidido el “maillot amarillo”, viene una etapa de media montaña en Saint Ettien, una jornada llana, y la última crono de 52 kms de sufrimiento para llegar al día siguiente a París.

Por lo tanto, este año tenemos un primer bloque muy innovador, no excesivamente duro, pero atractivo para el espectador, dejando atras aquellas 10 etapas llanas, aburridas…en las que muchos españoles aprovechabamos para echar una cabezadita delante del televisor.

En definitiva, estamos ante un buen Tour, ahora solo falta una buena representación española para rematarlo.